Un grupo de investigadores chinos pertenecientes al Keen Security Lab de Tencent, han publicado un artículo acompañado por un vídeo en YouTube, donde demuestran cómo lograron hackear un Model S de Tesla para obtener acceso y control remoto sobre diversas funciones del automóvil:
Los tres empleados explican cómo desde su ordenador portátil son capaces de abrir la puerta, encender los intermitentes, manejar el aparcamiento semiautomático, acceder a funciones de la pantalla central del vehículo, abrir el maletero, poner en funcionamiento los limpiaparabrisas o cerrar un espejo retrovisor mientras iba circulando. Lo más preocupante es que lograron controlar los frenos del vehículo.
Nada más detectar esta incidencia, el equipo de Keen Security Lab contactó de inmediato a la gente de Tesla y ellos ya aplicaron una actualización de su firmware para parchear estos fallos.
Según el propio informe emitido por Tesla:
Tras recibir el aviso, en sólo 10 días Tesla ya ha desplegado una actualización de software (v7.1, 2.36.31) que se ocupa de estos problemas de seguridad. La vulnerabilidad sólo ocurría cuando se utilizaba el navegador web, además de necesitar que el coche estuviera físicamente cerca y conectado a un punto de acceso wifi. Estimamos que el riesgo era muy bajo para nuestros clientes, pero esto no implica que no tuvieramos que solucionar el problema con la máxima rapidez.
Nos comprometemos con la comunidad de investigación para poner a prueba la seguridad de nuestros productos para así corregir las vulnerabilidades potenciales antes de que provoquen problemas de nuestros clientes. Felicitamos al equipo que detectó este error y los recompensaremos según nuestro programa de detección de errores, el cual se creó para fomentar este tipo de investigaciones
Nos alegra y nos sorprende la velocidad con la que Tesla resuelve este tipo de problemas. Con otros grandes fabricantes europeos, aún estaríamos esperando la llamada del taller para ir a la revisión de nuestro coche.