Es un hecho y casi podríamos decir que un dicho ya popular, que la peor inversión que podemos hacer es en la compra de un vehículo nuevo. Quién no ha oído la famosa frase de: «En cuanto sacas el coche del concesionario, su valor ha caído entorno a los 4.000 euros«. Lógicamente es algo que tiene sentido, puesto que si queremos comprar un vehículo de segunda mano, el precio objetivo debe ser considerablemente inferior al que conseguiríamos en un concesionario.
No nos engañemos, esto también ocurre a los vehículos de Tesla. No son ninguna excepción, pero en cambio parece ser que, en proporcion al resto de vehículos, su devaluación es inferior. El estudio viene de Autolist, una empresa de venta de vehículos de segunda mano ubicada en los Estados Unidos. Desde aquí nos informan que la venta de un Tesla Model S usado se sitúa entorno a los 87 días desde que se publica y que su devaluación respecto al precio de venta fue menor al resto de coches de su propio segmento: Audi A7, Porsche Panamera, BMW Serie 6 y Mercedes-Benz CLS.
Para el estudio, Alex Klein se centró en más de 10 millones de anuncios y su conclusión fue que efectivamente, los vehículos de Tesla tenían mejor salida al mercado que los de General Motors o la todopoderosa Ford.
Si buscamos un símil, tenemos en teléfonos a la famosa Apple, donde ya sabemos que en la venta de un terminal de segunda mano siempre recuperaremos mejor la inversión que si compramos un terminal Android, incluso siendo Samsung. Oferta, demanda y precios que pone el mercado, pero en este caso también debemos tener en cuenta que un vehículo eléctrico tiene menos piezas de desgaste que uno térmico, siendo el único riesgo en estos vehículos la degradación que pueda tener la batería. ¿Dejaremos de ver la compra de un vehículo nuevo como una inversión «perdida»?