Tal y como comentamos en el titular, por los alrededores de Palo Alto ha sido visto un Tesla Model S con un sensor LIDAR montado en el techo. Al parecer, Tesla estaría lista para lanzar en breve el nuevo conjunto de sensores de última generación en el Autopilot , aunque el propio sensor LIDAR no parecería formar parte de ellos según palabras del propio Elon Musk.
El vehículo fue descubierto por el propietario de un Tesla que publicó la imagen que os mostramos en un blog:
El vehículo de prueba de conducción autónoma (no semi-autónoma) de Tesla lo han tratado de camuflar de la mejor forma posible. Le han puesto un logotipo gigante de la Universidad de Stanford en el parabrisas trasero y un marco de matrícula. Claramente, Tesla está tratando de convencer a la gente que esto es parte de un proyecto de investigación de la universidad. Y todos sabemos que Stanford tiene un poder adquisitivo elevado, pero dudo mucho que estén utilizando un Model S con fines experimentales. Mis sospechas se confirmaron de que se trataba de un vehículo corporativo Tesla cuando lo vi entrar en el aparcamiento trasero de su sede.
Varios vehículos de Tesla ya han sido vistos con sensores LIDAR en el pasado, pero nunca se ha confirmado que sean vehículos de propiedad de Tesla. Otras empresas que trabajan en la tecnología de conducción autónoma, como Bosch, han utilizado varios Model S en el pasado para probar su hardware. Aunque no es una «confirmación» tal y como reclama el que ha visto el vehículo y ha tomado la foto, el hecho de que se detuvo en el estacionamiento de la sede de Tesla podría ser un indicador bastante fiable de que el fabricante está operando con este vehículo y este tipo de sensores.
¿Qué es LIDAR y cómo se usa en un vehículo autónomo?
LIDAR es un acrónimo de Light Detection and Ranging o Laser Imaging Detection and Ranging y permite medir la distancia existente entre el emisor láser y el objeto empleando un haz láser pulsado. Esta distancia se determina midiendo el tiempo de retraso entre la emisión del pulso y su detección por el reflejo de la señal.
Los sensores LIDAR actualmente son una de las piezas fundamentales para los coches autónomos, básicamente son sus ojos a la hora de conducir.
Suelen estar montados sobre la zona superior del coche para poder tener una visión de 360 grados sobre lo que sucede alrededor. Cada píxel de los sensores LIDAR de pulsos instalados en los coches registra el tiempo que tarda este pulso láser en recorrer la escena y rebotar en la cámara. Cada uno de estos píxels recoge muestras de esta corriente entrante tanto a nivel de fotones como de profundidad para poder enviar al ordenador que controla el coche imágenes en 3D del exterior del coche, la ubicación de las mismas y la intensidad de cada reflexión.
Todas las empresas que trabajan en mejorar los sensores LIDAR tienen dos objetivos: hacer los sensores más pequeños y ligeros y conseguir que capturen mucha más información.