Model 3: ¿Estrategia de Tesla o golpe de realidad?

Durante el día de ayer Tesla publicó en su blog una nueva entrada donde trataban de aconsejar a futuros clientes de si elegir un Tesla Model 3 o un Tesla Model S. Os dejamos la traducción literal:

Nos hemos estado preparando para el Model 3 con avances en la fabricación,
expandiendo nuestra red de carga, mejorando el servicio y abriendo más tiendas,
entre otras muchas cosas.

 

Con el nuevo modelo que viene este año sabemos que nuestros clientes tienen
preguntas sobre cuál es el mejor coche para ellos. Una pregunta que ya nos han hecho
es: «¿Debo cambiar mi Model S por un Model 3?» El Model 3 será nuestro nuevo coche,
pero no es la «Versión 3» o la próxima generación de Tesla. Nuestros modelos premium
con precios más elevados todavía incluyen la tecnología más avanzada y la mejor
experiencia de conducción que tenemos que ofrecer.

 

El Model S es el líder de su clase en todas las categorías y, por ello, el 94% de nuestros propietarios dicen que comprarían el Model S otra vez. Tiene una calificación de seguridad 5 estrellas y continuará siendo nuestro buque insignia con mayor autonomía, más aceleración, más potencia, más espacio para carga y pasajeros, más pantallas (dos) y más opciones de personalización. Con Ludicrous + el Model S ha llegado de 0 a 100 km/h  en un tiempo de 2,28 segundos como midió Motor Trend, convirtiéndolo en el vehículo con la aceleración más rápida del mundo. El Model S también seguirá siendo el vehículo con mayor autonomía que ofrecemos, capaz de llegar a los 632 kilómetros con una sola carga.

 

El Model 3 es más pequeño, más simple, y vendrá con menos opciones que el Model S, pero hace que la sensación de conducción sea totalmente confortable y ofrece una buena autonomía de al menos 215 millas (346 kilómetros) en el modelo de salida.

 

La base de cualquier Tesla es la seguridad y ofrecer a nuestros clientes la máxima seguridad es parte de cada decisión que tomamos. Por ello, todos los vehículos Tesla (incluido el Model 3) incluyen el hardware de conducción autónoma completa que, a través de las actualizaciones de software, permitirá que los Tesla sean sustancialmente más seguros que los conductores humanos. A medida que avanzamos en las pruebas y validaciones de nuevas funcionalidades, los clientes pueden esperar un aumento en el número de actualizaciones que llegarán a sus vehículos este año. Y mientras la innovación en Tesla nunca parará, nuestros mejores vehículos ya están disponibles para su compra y en las carreras a día de hoy.

Model 3 expuesto en la inauguración de la Gigafactoría

¿Existe un optimismo desbordado acerca del Model 3?

Parece, según leemos por redes sociales, foros y otros medios especializados, que mucha gente está sintiendo cierto «rechazo» hacia el nuevo modelo de Tesla. Un modelo que prometía un precio de salida de 35.000 dólares, capacidad de recargarse en supercargadores y una autonomía de 345 kms. Tal fue la aceptación de este modelo, que en todo el mundo se reservaron más de 400.000 unidades. Y ahora Tesla tiene el gran reto de satisfacer una demanda tan desmesurada que ha roto todos los records de todos los fabricantes en lo referente a número de ventas de un prototipo. Un modelo que, como sabemos, aún no se ha comercializado.

Claro, si el modelo no se ha comercializado aún no se tiene el detalle de cómo será exactamente su versión final. Un ejemplo fue el Model S, allá por 2012:

Podemos ver que la versión alpha del Model S era un vehículo con unas líneas mucho más redondeadas respecto a lo que fue la versión final.

Incluso si nos vamos a interiores, podemos ver cómo era el interior del Model X cuando se presentó como prototipo:

Vemos en estos casos que el exterior sí guarda cierta relación con la realidad porque evidentemente el chasis no da juego a mucho más: el «armazón» del coche debe amoldarse al chasis del vehículo. Pero en cambio, el interior da muchísimo juego: pueden diseñar un interior totalmente distinto a la realidad como podemos ver que fue el caso del Model X en su presentación. ¿Podría ser este el caso del Model 3?

Y por otro lado, la entrada en el blog de Tesla donde mencionan que el Model 3 no debe considerarse una evolución tecnológica de su buque insignia puede originar cierta sensación de «desengaño». Recordemos que el buque insignia de la marca es un vehículo de 100.000 euros, frente a uno que costará unos 60.000 euros si está completamente equipado.

Cualquiera en su sano juicio debería saber que nadie regala duros a cuatro pesetas. Por lo tanto, ¿podríamos imaginar que un vehículo que cuesta casi el doble iba a tener la misma tecnología y las mismas prestaciones que el Model 3?. En principio, cualquiera que haya respondido «Sí» a la pregunta, sin lugar a dudas se sentirá desengañado el día de la presentación. O ese es nuestro parecer.

Entonces, ¿qué no tendrá el Model 3?. Pues, bajo nuestro propio punto de vista, suponemos lógicamente que el tamaño de la consola central será inferior, que seguramente la conexión de datos que es gratuita en el Model S pasaría a ser de pago en el Model 3 (algo así como una cuota mensual de datos). Lógicamente la potencia y las baterías tendrían menos prestaciones, el maletero no tendrá apertura y cierre eléctrico, los tiradores de las puertas imaginamos que tampoco serán eléctricos sino mecánicos…En fin, una serie de elementos que caracterizan un producto de lujo de otro que no lo es (o al menos no debe considerarse como tal si lo comparamos con otros segmentos que sí lo son)

Por lo tanto, si has reservado un Model 3 y pretendías tener las mismas funcionalidades y las mismas prestaciones que tiene un Model S, te adelantamos que cuando se realice la presentación podrías llevarte un desengaño. En otro caso, creemos que tu reserva se ha realizado con unas perspectivas que seguramente se cumplan en el futuro modelo de la marca. Lo no se puede negar, es que no incluir un velocímetro sobre el volante sería un claro error de diseño de la marca. No todo el mundo tendrá autopilot en su coche porque no podrán permitírselo o simplemente porque quieren disfrutar de la conducción de toda la vida y no están preparados para un vehículo autónomo. Y estos clientes no deben penalizar este fallo de diseño.

O quizás simplemente con la declaración de Elon en Twitter y la entrada en el blog de Tesla, sólo quieren transformar reservas de Model 3 en ventas de Model S. Todo con idea de conseguir que los números de entregas sigan aumentando, conseguir las 50.000 unidades vendidas en el segundo semestre de 2017 y también disminuir el número de unidades a producir de Model 3, para así evitar retrasos desmesurados y que los futuros clientes del nuevo modelo no se sientan desfraudados por una espera que podría ser excesivamente retrasada.

¿Qué opináis vosotros?