Las revolucionarias alas de halcón que Tesla diseñó para el Model X les está trayendo más de un dolor de cabeza. Inicialmente fueron problemas en la producción que provocó retrasos en las entregas. Luego se descubrieron fallos en el sistema de cierre, puesto que detectaba objetos «fantasma» y no terminaba de realizar el cierre. Evidentemente, todos estos problemas los ha ido esquivando Tesla y los ha ido puliendo. Pero como software nuevo que es, se arreglan unas cosas y se estropean otras. En este caso, se ha detectado fallo en cierre de alas de halcón en el Model X
Tras la última actualización del firmware de Tesla en el Model X y con la versión v 7.1.2.23.100, Tesla habría reducido la capacidad de detección en los sensores situados en el panel del techo de las puertas traseras.
Con esta reducción de la sensibilidad, el fabricante parece haber solucionado el problema de los objetos «fantasma» que os comentábamos, pero no se han fijado en la consecuencia que ello trae: es capaz de atrapar una mano o un brazo si estamos despistados y la puerta se está cerrando. Sin lugar a dudas, un importante foco de posibles lesiones. Este fallo se ha presentado en un video y se ha compartido ampliamente por los foros de Tesla.
Os mostraremos un video realizado donde se hacía la prueba con un pepino. En uno de ellos la puerta se detiene después de sentir resistencia y romper el vegetal:
En este otro el propietario del Model X muestra que se pueden llegar a aplicar hasta 30 kg de presión antes de detenerse, lo cual puede ser muy peligroso.
Si bien la forma de cerrar la puerta debe realizarse presionando un botón que existe en un lateral, no quita que esto debiera de pulirse de manera que se evitara el riesgo de daños sobre seres humanos.
Esperaremos que este problema pueda ser resuelto pronto por los técnicos de Tesla.