A pesar de encontrarse la Gigafactoría en una primera fase de desarrollo, el impacto de la presencia de Tesla en el norte de Nevada es tal, que un reciente estudio de venta de viviendas indica que la zona cercana a la fábrica se habría revalorizado hasta en un 42%. Este aumento es significativamente superior a la media nacional, puesto que en el país la media fue de un 31%.
Mientras que muchos expertos lo vinculan a la instauración de la Gigafactoría en la zona, otros también lo justifican con el nuevo Centro Industrial Tahoe-Reno que también se abrió en la zona durante el mismo periodo de tiempo. Lógicamente los promotores del lugar sólo lo justifican con la Gigafactoría porque mediaticamente tiene más atracción para los compradores.
Entendemos que los vendedores quieren aprovechar el tirón que tiene la empresa en el sentido de que ésta necesitará contratar a muchos trabajadores y lógicamente aquellos que sean de la zona tendrían más ventajas que aquellos que viven fuera. Actualmente, la Gigafactoría tiene más albañiles trabajando (656 trabajadores) que personas destinadas a desarrollar baterías (419 empleados si juntamos los de Tesla y Panasonic). Pero esto a corto plazo cambiará, puesto que las primeras baterías deberán empezar a construirse a finales de este año.
Las primeras estimaciones de Tesla indicaban que la Gigafactoría crearía unos 6.500 puestos de trabajo en plena producción. Pero esto era cuando se esperaba que la producción fuera de 50GWh. Pero durante la inauguración de la planta, Elon Musk afirmó que van en camino de mejorar la eficiencia y que la compañía espera aumentar la producción hasta los 150 GWh, lo cual el número de empleados podría hasta duplicarse.